El indicador que mide JP Morgan se ubica en 1702 puntos, cayendo 500 puntos básicos este año y más de 1200 puntos básicos desde sus picos de julio pasado cuando llegó a operar en 2975 puntos.
El riesgo país cae 500 puntos básicos este año de la mano de una recuperación en la deuda.
Existieron factores globales y locales para explicar el fuerte rally de los bonos, que suben más de 80% desde octubre. El riesgo de recorte en los bonos en el corto plazo creció gracias al rally de los últimos días.
Sin embargo, en el mediano plazo el mercado sigue viendo mayores subas para los bonos y un riesgo país en niveles inferiores.
Fuerte baja del riesgo país
Gracias al rally de la deuda, el riesgo país muestra una fuerte contracción en lo que va del año.
El indicador que mide JP Morgan se ubica en 1702 puntos, cayendo 500 puntos básicos este año y más de 1200 puntos básicos desde sus picos de julio pasado cuando llego a operar en 2975 puntos.
De esta manera, el riesgo país se ubica en su menor nivel desde abril de 2022, cuando las tensiones se estaban incrementando durante la gestión de Martín Guzmán.
Los bonos en dólares son los grandes protagonistas y acumulan ganancias de más de 80% desde octubre a la fecha.
El Global 2029 sube 80% desde octubre pasado, similar a la suba del Global 2030, que gana 77%. En el tramo medio, se ven avances de entre 57% y 69%, similar a las ganancias que se registran en los Globales más largos, a 2041 y 2046.
En el día de hoy se produjo un fuerte avances luego del anuncio del ministro de Economía, Sergio Massa, en el que anticipó que el Gobierno procederá a la compra de bonos en dólares por un total de u$s 1000 millones.
Las causas globales detrás del rally
La suba en los bonos en las últimas semanas se debió tanto a factores globales como a los locales.
El mercado internacional ayudó para que la deuda pueda mejorar, y, por lo tanto, para que el riesgo país pueda caer a los niveles actuales.
Los últimos datos económicos en EE.UU. generaron algo de esperanza sobre el futuro de la dinámica de la política monetaria de la Reserva Federal.
En la primera semana del 2023, se publicaron datos del mercado laboral que, si bien reflejaron que el mismo sigue muy ajustado, existió una señal que los inversores festejaron. Este fue que los salarios crecieron menos de lo esperado, aumentando 4,6%, bajando desde el 5,1% anual de noviembre y debajo del 4,8% esperado.
Esto reflejó que las presiones inflacionarias provenientes del mercado laboral podrían estar cediendo, aun a pesar de que EE.UU. se encuentra en pleno empleo, con una tasa de desempleo del 3,5 por ciento.
Por otro lado, el dato de inflación fue en línea con lo que esperaba el mercado, cayendo a 6,5% interanual en 2022, alejándose del pico de 9,1% de mediados del año pasado.
Esto generó un escenario de expectativas positivas sobre una Fed más dovish, subiendo menos la tasa.
Estas noticias permitieron que todos los mercados de deuda muestran ganancias de hasta 5% en las distintas curvas solamente este año, mejorando el contexto para la deuda local.
Lucas Longo, estratega de Banco Mariva, considera que el principal driver en la deuda soberana es el contexto internacional.
«Argentina está dentro de los mejores desempeños de deuda high yield, seguida de nombres como Pakistan, El Salvador, Sri Lanka y Ecuador. Todos créditos relativamente pobres que suelen tener subas cuando el contexto global acompaña. Gracias a que la expectativa sobre la Fed se moderó desde comienzos de año, los nombres high yield están teniendo un gran desempeño«, sostuvo.
Con una visión similar, Mariano Calviello, head portfolio manager de Fondos FIMA, destacó que existe un viento de cola global gracias a las expectativas de la política monetaria de la Fed.
«El mercado parece haber incorporado un escenario en el que la FED vaya a subas menores, incluso terminando el ciclo en una tasa final más baja de la que se imaginaba anteriormente. el universo de renta fija ha incorporado ya la totalidad del movimiento, y esto se nota desde el mes de noviembre. En este contexto, es un importante viento de cola para la deuda argentina, sobre todo teniendo en cuenta desde las valuaciones en las que se encuentra«, dijo.
Factores locales
Por otro lado, las variables locales que permitieron ver una mejora en la deuda estuvieron fuertemente relacionados con cuestiones políticas.
El mercado especula con un giro hacia la centro derecha en las nuevas elecciones, lo cual generó expectativas positivas entre los inversores, con las acciones y los bonos mostrando ganancias abultadas en las últimas semanas.
De esta manera, Longo resaltó también que «comenzamos a ver un mayor interés de inversores sobre el ´trade electoral´ en Argentina, aunque el flujo interesado en esta historia todavía se muestra incipiente».
Javier Casabal, estratega de renta fija de Adcap Grupo Financiero, le ve buen potencial a la deuda en el mediano plazo a causa de mejores expectativas inflacionarias y el trade electoral.
En ese sentido, centra su atención en la deuda de mayor plazo.
«Si se disipa la preocupación externa respecto a la inflación, y a nivel local, seguimos avanzando hacia el escenario de candidatos moderados que se reconfiguró a partir de la salida de la oferta electoral de Cristina Fernández de Kirchner, los bonos soberanos en dólares pueden volver rápidamente a los niveles vistos entre noviembre de 2021. En ese caso, los niveles actuales pueden ser más un piso que un techo», dijo Casabal.
Riesgos de corto plazo
Tras el fuerte avance de las últimas semanas casi sin descanso, los riesgos de que el mercado transite un recorte son mayores.
Aquellos inversores que compraron temprano pueden que encuentren un buen momento para una toma de ganancias y reducir parcialmente su tenencia, lo cual podría provocar una baja transitoria.
Además, los riesgos de corto plazo en materia del futuro de la política monetaria a nivel global también podrían generar alguna baja en el mercado global, sobre todo contemplando que en febrero la Reserva Federal se volverá a reunir, y en la que se espera una nueva suba de tasas.
Los analistas de MegaQM explicaron que los activos locales han reaccionado de manera bastante alineada con el resto de los activos emergentes, aunque con un Beta claramente mayor.
Según detallan, esto es lo que se pudo exhibir en las últimas semanas.
«El flujo positivo reciente, iniciado por los resultados que ha logrado la FED con su política monetaria y una expectativa menos alcista hacia adelante han generado una depreciación del dólar y han sumado atractivo a los mercados emergentes. En ese contexto la deuda local reflejó ese comportamiento, mejorando paridades y achicando la brecha con respecto al resto de los países que conforman el EMBI Global«, comentaron.
Sin embargo, también remarcaron que los niveles actuales de riesgo país siguen siendo mayores a los mínimos alcanzados durante la pandemia y que aún podría haber más espacio para una baja adicional.
«En junio 2021 el riesgo país global era de 307 puntos y el de Argentina estaba en 1514. Es decir que el spread entre ambos era de 1207 puntos. En la actualidad esa brecha es de 1612 puntos. Es decir, los emergentes todavía tienen algo de recorrido hacia abajo y el spread local también. Este año será clave para ver si se logra recuperar terreno y bajar el riesgo país. El contexto externo es menos negativo que unos meses atrás, pero todavía falta que se consoliden los pasos locales para retornar el mercado de capitales», dijeron.
Finalmente, Juan Manuel Franco, economista jefe de Grupo SBS, entiende que existen riesgos de corto plazo provenientes del contexto global, aunque considera que la tendencia de mediano plazo se mantiene.
«Creemos que tanto este rally como el mayor tightening monetario de la Fed a nivel mundial y su efecto sobre la renta fija podría limitar en el corto plazo el upside de estos papeles. No obstante, esto, reiteramos que seguimos siendo constructivos en Globales a mediano plazo, incluso luego del rally», dijo.
Fuente: https://www.cronista.com/finanzas-mercados/riesgo-pais-en-picada-regresa-a-los-1700-puntos-y-remarcan-mayor-potencial-bajista-adicional/